“Al dar clic en el falso video se descarga un malware que, por un lado, infecta al equipo con troyanos para el robo de información. Además, instala una extensión en el navegador para publicar en Facebook de forma automática y seguir propagando el contenido. Es probable que también robe credenciales de Gmail ya que se abre una pestaña del navegador que requiere acceso a la cuenta”, explica Matías Porolli, especialista en seguridad informática de ESET Latinoamérica y encargado de esta investigación.
- El título del enlace malicioso que se muestra tiene el mismo nombre de la persona que lo está compartiendo (la persona que etiqueta a los demás lo hace de forma involuntaria).
- La configuración de privacidad del post es pública, con lo cual la propagación es muy efectiva ya que muchos usuarios la verán en su página de inicio aún sin haber sido etiquetados.
- Al querer acceder a las extensiones (desde la configuración de Chrome), se cierra inmediatamente la pestaña, de manera que no es posible ver qué se instaló ni deshabilitarlo.
- Se modifica la barra de Facebook, quedando oculta (aunque no desaparece totalmente, sino que es difícil de encontrar) la opción de configuración que permite cerrar sesión y modificar los ajustes de privacidad, por ejemplo, para ocultar un contenido de los demás contactos.
Por su parte, las publicaciones que se generan tienen URLs distintas para cada publicación de un falso video, y puede verse que se generan diversos subdominios de commondatastorage.googleapis.com. Todos tienen la misma apariencia y el mismo engaño: el aviso de que Flash Player está desactualizado, proporcionado un supuesto enlace desde donde se puede descargar para poder ver el video en cuestión.
“Es posible que este caso sea parte de una campaña similar que esté en desarrollo, sobre todo si consideramos el caso de la semana pasada en el que una falsa actualización de Adobe Flash logró infectar a más de 100 mil usuarios de Facebook en solo dos días”, agregó Porolli.